Servicios Educativos del Estado de Chihuahua, aplica las primeras evaluaciones a menores, con el fin de colocarlos en el nivel escolar correspondiente.
Este examen integrado por varias decenas de reactivos, fue elaborado en inglés por el Departamento de Apoyo Técnico a la Supervisión de la Dirección de Educación Primaria de SEECH.
Los primeros tres alumnos que aplicaron para dicha prueba, son integrantes de una familia de origen menonita que arribó a Chihuahua recientemente, luego del inicio de la nueva administración federal en Estados Unidos.
Ante la posibilidad de la deportación, debido a la política del gobierno estadounidense en contra de extranjeros con residencia irregular en el vecino país, esta familia menonita llegó al estado y se asentó en la región de Cuauhtémoc.
Los tres hermanos aplicaron por tanto para esta evaluación, denominada en su traducción al español, “Examen a título de suficiencia para la acreditación de la Educación Primaria”.
El documento es un examen general de conocimientos en las materias de Español, Ciencias Naturales, Geografía, Historia, Formación Cívica y Ética y preguntas sobre razonamiento lógico.
La evaluación fue aprobada por los tres menores, con calificaciones superiores a 8 y 9, por lo que fueron ubicados y ya inscritos en los grados primero, segundo y tercero de secundaria, en un plantel de este nivel ubicado en la colonia Rubio, en la zona de Cuauhtémoc.
El Director de Educación Primaria de SEECH, profesor Jaime Bustillos, señaló que la prueba mencionada será aplicada a todos los niños, niñas y jóvenes que lleguen de Estados Unidos, ante la actual política migratoria del vecino país, con el objetivo de que sean inscritos de manera rápida en planteles de nivel básico y pueden seguir aquí sin mayores interrupciones sus estudios.
A su vez el profesor Francisco Colmenero, Jefe del Departamento de Apoyo Técnico a la Supervisión del nivel Primaria de SEECH, explicó que adicional al servicio educativo que se debe prestar a estas familias, que muy probablemente seguirán arribando a la entidad, procedentes de Estados Unidos, se puede buscar para tales estudiantes alguna atención complementaria requerida.
Recordó que se trata en casi todos los casos, de niños y niñas nacidos en aquel país, quienes no hablan o casi no dominan el idioma español y eso puede representar para ellos y ellas, una barrera en la continuidad de sus procesos de aprendizaje.
Otro problema que se da en tales situaciones, es el hecho de que las familias migrantes con frecuencia no presentan la documentación escolar comprobatoria de los estudios realizados por sus hijos en Estados Unidos y por ello es utilizada la citada prueba de conocimientos, con el fin de ubicar al alumno o alumna, ya aquí en México, en el nivel académico correspondiente.
