En su casa, con su gente y con su transmisión, las Chivas del Guadalajara alzaron el trofeo de campeones del futbol mexicano once años después de su último título en esta categoría, y para conseguirlo requirió de una plantilla con un valor de más de 44.6 millones de dólares (mdd).

El equipo del empresario Jorge Vergara se impuso el domingo a los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), con un sufrido 2-1 (4-3 global) y un toque de polémica para coronarse como el campeón del Torneo Clausura 2017 de la Liga Mx, por primera vez desde el 2006.

De acuerdo con el Transfermarkt, los 23 jugadores que integran la plantilla de Chivas suman un valor de 39.9 millones de euros, es decir, poco más de 44.6 mdd (con el tipo de cambio a 1.12 dólares por cada euro), siendo el mediocampista Rodolfo Pizarro el de mayor valor con 5.0 millones de euros (5.59 mdd) y el de menor valor el guardameta suplente Miguel Jiménez con 200,000 euros (224,000 dólares).

Del conjunto tapatío, además de Pizarro, sólo cinco jugadores superan los 2 millones de euros: el portero Rodolfo Cota (2 mde – 2.24 mdd), el “gallito” Vázquez, el extremo Isaac Brizuela y el delantero Alan Pulido tienen un valor de 2.5 mde (2.8 mdd); y el mediocampista Orbelín Pineda, tasado en 4 mde (unos 4.47 mdd).

En el último año y medio, Chivas gastó más de 20 mdd en fichajes y, junto con Tigres, es de los que más invirtieron en jugadores, con compras como la de Alan Pulido o Rodolfo Pizarro. De acuerdo con el ranking de Forbes México que mide el valor de los equipos del futbol mexicano, el club Guadalajara está valuado en 300.5 mdd.

Con este campeonato, el equipo dirigido por Matías Almeyda demostró que un equipo 100% mexicano puede llegar a aspirar en grande. Además, el Rebaño Sagrado conquistó su duodécimo título, con el que iguala a su acérrimo rival el club América, de Emilio Azcárraga Jean, en el primer escalón de los clubes más ganadores del balompié mexicano.

Después de un empate a dos en el partido de ida en Nuevo León, en el segundo partido de la gran final, las Chivas salieron con la confianza de quien se siente respaldado por su afición y fueron las que inauguraron el marcador por conducto de Alan Pulido, quien a los 17 minutos remató de volea dentro del área un largo pase de Oswaldo Alanís.

Sin embargo, Tigres buscaba el bicampeonato y para ello se fue encima del conjunto rival, y sus esfuerzos estuvieron a punto de ser retribuidos a los 65 minutos, pero el francés André-Pierre Gignac no aprovechó la oportunidad y su disparo se fue desviado, a pesar de estar frente a la portería defendida por Rodolfo Cota.

Ese error costó caro, y cinco minutos después José Juan Vázquez disparó desde fuera del área y para su fortuna y la de Guadalajara un defensor regio desvió el esférico, dejando sin oportunidad al portero argentino Nahuel Guzmán.

Con el marcador en contra y poco menos de 20 minutos para empatar o remontar, Tigres le puso emoción al partido y al minuto 88 el argentino Ismael Sosa venció al meta tapatío con un disparo cruzado desde fuera del área.

Ya en tiempo de compensación, Ismael Sosa ingresó al área de Chivas, aunque con el balón ligeramente adelantado, y en una fuerte jugada defensiva Jair Pereira llegó tarde al balón y dio una patada al rival, no obstante, el árbitro central consideró que no hubo falta y por tanto no marcó el penal a favor del cuadro regiomontano, generando fuertes reclamos de los jugadores.

Minuto y medio después dio el silbatazo final y las Chivas se coronaron campeones del Torneo Clausura 2017.












(forbes)