La industria automotriz acumula pérdidas por 350 millones de pesos, ocasionadas por los bloqueos intermitentes de los maestros de la sección 18 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores del Estado (CNTE) durante dos semanas.

Aunque el Secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida y el de Economía, Ildefonso Guajardo, se comprometieron a una solución inmediata para levantar los bloqueos de este grupo de la disidencia magisterial, “es frustrante y no se ve solución”, lamentó Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

En entrevista precisó que autopartes de importación están paradas en esa región sin poder llegar a tiempo a las diferentes plantas automotrices, lo que ya derivó el paro de labores en Ford Cuautitlán, General Motors se encuentra en proceso de evaluación y otras más como KIA, FCA, y Honda se encuentra en problemas para el ensamble. No sólo la producción se ve afectada, sino el envío de vehículos para la exportación y el ingreso de autos procedentes de Asia.

De manera intermitente, la CNTE detiene el tráfico y el paso de los ferrocarriles en diferentes puntos de Michoacán, como Lázaro Cárdenas, Uruapan Caltzontzin, Maravatio, Zamora y Pátzcuaro.

“La industria automotriz ha invertido decenas de millones de dólares con la confianza de que prevalece el Estado de derecho. Preocupa que problemáticas cómo esta causen daños al país; como un destino de inversiones ante la violación del Estado de derecho”, acusó Solís.












(El Economista)