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Ya no existen la derecha y la izquierda: Madero

Existen en todo caso las corrientes retardatarias y las modernizadoras, en la política de nuestro país.





13 de Abril de 2018 a las 11:10 hrs -- Centinela Digital
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“En la política, no creo en la derecha ni en la izquierda, creo que hay retardatarios y modernizadores, los que quieren el estatus quo y los que queremos un cambio modernizador, los que quieren conservar sus privilegios y los que queremos que ya no existan esos privilegios que despojan a la gente de sus oportunidades; Queremos tener una sociedad que le garantice por igual el acceso a las oportunidades para todos, al desarrollo económico, la justicia, la educación y la información”.

Así lo expresó hoy el candidato de la coalición Por México al Frente, Gustavo Madero, quien en formula con Rocío Reza integran la propuesta de Chihuahua para el Senado de la República.

Agregó que quienes afirman que intentar buscar las convergencias entre desiguales es como mezclar el agua y el aceite, le han hecho daño a la figura del consenso y por lo tanto, le hacen daño a México, pues la política es justo el arte de sí llegar a acuerdos, de sí hacer las cosas y de sí avanzar en lo que se está de acuerdo. Habló del ejemplo de Alemania donde necesariamente se forma gobierno en coalición, como actualmente entre la socialdemocracia y la democracia cristiana, y eso garantiza la solidez de los proyectos del país.

En cuanto al modelo económico Madero Muñoz preciso que, en México, la política de cuates, el capitalismo de compadres en la conformación de grandes empresas le ha hecho mucho daño al país. “Las empresas más poderosas del país todas son concesionarias del Estado Mexicano”. A diferencia de Estados Unidos, en donde las empresas más poderosas surgen de emprendedores que aprovechan las nuevas tecnologías y que fortalecen a la economía con creatividad en la inversión.

Aseguró que en México el que hace dinero, desafortunadamente, es el que tiene más relaciones con el gobierno y allí tenemos de prueba las grandes concesiones que conocemos, la de telefonía, bancos, aeropuertos y minas, entre muchas. “En México no prospera la meritocracia, sino las relaciones políticas”.

“Eso es lo que queremos cambiar; llevar a nuestro país a un nuevo modelo político, económico y social en donde las instituciones realmente se utilicen para beneficio y justicia a favor de la sociedad. Acabar con el abuso del poder de quienes creen que con el voto reciben un patrimonio propio, un título de propiedad y usan los recursos del Estado para fines particulares o de su parido”.

Madero Muñoz consideró que México vive un momento crucial. “Vivimos momentos de gran zozobra, de gran deterioro social, desánimo, pesadez y confusión, de desesperanza, pero todo esto se debe a que el régimen actual está agotado”.

“No resuelve los problemas de las mayorías, no imparte justicia, hay mucha impunidad, no resuelve la exclusión, hay desigualdad y los beneficios del país se concentran en muy pocos”.

Por eso queremos cambiar de modelo, hacia un camino de inclusión, donde la ciudadanía participe en las decisiones que le afecta; reparar el entramado institucional que está debilitado. Toda la gente quiere un cambio y cuando vaya a votar tendrá dos ofertas de cambio: “la de Andrés Manuel López Obrador, que representa un cambio hacia atrás y la que nosotros planteamos, que representa un gobierno de coalición, abrir la gente por México al Frente".

Nuestra propuesta es un avance a un sistema parlamentario o de semi parlamentarismo, en donde el presidente no sea el tlatoani, el cacique o el mesías, sino que forme una pluralidad incluyente que se auto regule.

Nosotros partimos que es una nueva forma de gobierno, pero también cambios fundamentales estructurales, una nueva forma de recaudar y distribuir, por ejemplo, el salario mínimo que alcance para que la persona cubra sus necesidades básicas, que eleve su poder adquisitivo, mejorar el ingreso monetario de los que menos tienen.