El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que acepta la conclusión de los órganos de inteligencia de su país sobre la injerencia de Rusia en las elecciones de 2016, y aclaró que se equivocó al hablar del tema en la conferencia con el mandatario ruso,

En respuesta a las críticas por sus comentarios en la cumbre de Helsinki, en la que el mandatario ruso negó la injerencia en el proceso electoral estadunidense, Trump dijo hoy que tenía plena fe y apoyaba a las agencias de inteligencia de Estados Unidos.

"Acepto la conclusión de nuestra comunidad de inteligencia de que la injerencia de Rusia en las elecciones de 2016 ocurrió", dijo Trump a reporteros en la Casa Blanca.

"Me expresé mal (...) Quise decir que no veo razón por la que Rusia no estuviese detrás" de la injerencia en las elecciones, afirmó, aunque aclaró que las acciones rusas no tuvieron un impacto en el resultado electoral.

Dijo también que su gobierno trabajará agresivamente para proteger las elecciones legislativas de noviembre de 2018.

Más temprano, y al parecer sin importarle las críticas por su extraordinaria cordialidad ante un enemigo histórico de Estados Unidos, Trump tuiteó que su cumbre con Putin fue "incluso mejor" que la reunión con sus aliados de la OTAN la semana pasada en Bruselas.

Los cuestionamientos de Trump a las conclusiones de sus propias agencias de espionaje y su aparente aceptación de la respuesta de Putin, quien aseguró que Moscú no tuvo nada que ver en la injerencia en las elecciones, le valieron al mandatario estadunidense una reacción inmediata y visceral, tanto de sus correligionarios republicanos como la de sus críticos de siempre.

"Vergonzoso", "ignominioso", "débil" fueron algunos de los comentarios contra Trump . Hace ver a Estados Unidos "como un pusilánime", dijo el senador republicano Bob Corker, de Tennessee.



(Milenio)