Para lograr una reducción considerable en importaciones de leche, el gobierno del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, tendrá que destinar mil millones de pesos anuales al sector nacional, aseguró el presidente de la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec), Miguel Ángel García Paredes.
En el marco del Congreso del Sector Lácteo, el representante del organismo señaló que si se busca reducir la dependencia que tiene México de otros países como Estados Unidos en el mediano plazo, sería una visión aceptable, siempre y cuando el nuevo gobierno aplique medidas favorables para realizarlo.
“Mi cálculo es que Liconsa puede suspender las importaciones de leche si cuenta con alrededor de mil millones de pesos anuales para aplicarlos a compra de leche nacional, eso reduce de manera sustancial las importaciones de leche”, aseveró.
Expuso que si el objetivo es reducir la dependencia de las importaciones, Liconsa o la nueva Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) juega un papel fundamental, “lo digo porque es el segundo importador de leche en el país con el 30 por ciento del total”.
García Paredes detalló que si Liconsa en lugar de importar leche en polvo busca obtenerla de los productores mexicanos, tiene un impacto directo y a favor de la disminución de la dependencia de las importaciones; “eso tiene un costo que significa la diferencia entre el precio nacional 7.20 e internacional 5.50 de la leche".
“Bajar la dependencia del exterior que ahora está en 30 por ciento, bajarla un 10, 15 o 20 por ciento en uno, dos o tres años, yo lo considero viable si se establecen los instrumentos de política adecuados para hacerlo”, destacó.
Explicó que las necesidades adicionales de leche en México oscilan entre 25 y 30 por ciento del consumo total, mientras que en el país se consumen 15 mil millones de litros al año, se producen 12 mil millones de litros, por lo que se importan 4 mil millones de litros, “esa es la necesidad de producto que requiere la industria”.
Indicó que si bajar la dependencia de Estados Unidos fuera un objetivo del siguiente gobierno, la industria está lista para trabajar siempre y cuando las políticas sean pertinentes y se respeten las condiciones de libre mercado y así se puedan destinar recursos del sector público para apoyar la producción nacional.
Ante la propuesta del presidente electo de que México llegue a la autosuficiencia alimentaria en el sector agroindustrial, esta generaría un costo muy alto para el país, destacó el presidente de la Canilec.
“Llegar al 100 por ciento de la autosuficiencia alimentaria sería muy costoso y posiblemente demandaría un consumo extraordinario de recursos naturales que habría que medir, porque eso demanda muchísimo recurso natural”, resaltó.
(Milenio)
