El desborde de un río por las lluvias en Santiago Juxtlahuaca, Oaxaca, arrasó todo a su paso. Autoridades reportan más de 200 viviendas afectadas y 500 familias damnificadas, mientras el alcalde Nicolás Feria Romero implora por ayuda.

En un video publicado en redes sociales, el alcalde aceptó la capacidad de reacción de su gobierno quedo rebasada por la contingencia y advirtió que muchas familias quedaron atrapadas por las inundaciones que genero el desbordamiento del rio Juxtlahuaca.

Dijo que el cabildo acondicionó un albergue temporal en el centro del municipio para los habitantes de las colonias La Esperanza, Soledad y Las Américas, asimismo, por iniciativa de voluntarios se instalaron costales en las riveras de los ríos para proteger las viviendas.

En tanto en la zona de desastre, los habitantes reclaman la falta de ayuda de su presidente municipal y aseguran que unidos lograron ponerse a salvo del desbordamiento de los ríos con lo que salvaguardaron la integridad de sus familias.

“Muchos no salimos a la calle para no ser arrastrados por la corriente, nos subimos a las azoteas de nuestras casas donde pasamos la noche”, dijo David Méndez, uno de los representantes de los afectados en la colonia La Esperanza.

Los vecinos pidieron despensa o kits de limpieza para sacar el lodo de sus casas, ahora que el nivel del agua comienza a descender. Sin embargo, lamentaron que todas sus posesiones fueron destruidas por el agua.

Lo más afectados fueron los habitantes que tenían casas de un solo piso, que son la mayoría.

Los afectados piden la actuación de las brigadas sanitarias para que se fumigue y se establezcan cercos epidemiológicos que eviten la propagación de enfermedades gastrointestinales, ya que mucha del agua del rio que se salió de su cauce, rompió los drenajes sanitarios y pluviales.

La gente en este poblado no ha dormido, trata a su manera de rescatar lo poco que le arrebató la fuerza de la naturaleza.

​En tanto, las escuelas en la zona se reportan con graves afectaciones: la directora de la primaria Josefa Ortiz de Domínguez, Macaria Minera Pacheco, demandó el apoyo de las autoridades para que se puedan reparar los daños y la pérdida de materiales, como fue la caída de una barda.

Solo brigadistas de la Coordinación de Protección Civil han acudido al municipio para realizar una evaluación y recuento de los daños. También elementos del Ejército y de la Guardia Nacional aplican el plan DN-III para realizar labores de rescate y de limpieza en la demarcación.

(Milenio)