Dos décadas, más de 800 bandas y 2 millones de asistentes son las cifras que convierten al Festival Iberoamericano de Cultura Musical Vive Latino (VL) en uno de los más importantes y, gracias a eso, ha crecido su fuerza social; en su edición 21, una nueva palabra se suma a su vocabulario: sostenibilidad, si bien ya la han venido incorporando, como otros festivales de Ocesa, llega el año en que se fortalecerá y ya no la soltarán.
“Hace 40 años, cuentan los abuelos, la población nadaba y se divertía en las aguas del río Santiago en Jalisco; hace 20 años llegaron los químicos y la contaminación ha crecido a niveles agigantados. Por eso, este 2020 el VL invita a darnos cuenta de lo que sucede a nuestro alredor, la única forma de cambiar lo que no te gusta es entendiéndolo. La conciencia ambiental es uno de los ejes de cambio necesarios, entendiendo que existen otros importantes como la pobreza”, dice Jordi Puig, director de la máxima fiesta del rock en Latinoamérica. Y
agrega: “En Ocesa y el Vive Latino estamos integrando un nuevo término: sostenibilidad, entendida como el equilibrio generado entre la relación armónica de temas sociales, ambientales y económicos. Queremos ayudar a crear industria, fuentes de trabajo y derrama en el turismo de Ciudad de México sin olvidarnos de lo social, dar espacio a la ONG y promover la equidad de género, nuestros equipos siempre han estado conformados por mujeres, y más que nunca queremos mirar lo ambiental, reforzar acciones que tenemos y crear otras”.
Desde ediciones pasadas se han promovido los vasos elaborados de cebada y no dan popotes, los puestos de alimentos deben entregar utensilios biodegradables, se impulsa la separación de residuos y habrá contenedores para colillas de cigarro, reducirán las lonas de plástico, impulsarán una mejor movilidad del público con Regreso Seguro y Ticket2ride y compensarán la emisión de carbono con una reforestación en comunidades de Oaxaca.
“Para que esta gran fiesta, cuyo corazón es la música, siga gozando de cabal salud, es necesario tener equilibrio entre lo social, económico y ambiental”, reitera Puig, para después dar espacio a algunos de los artistas que sonarán el 14 y 15 de marzo en la Curva 4 del Autódromo Hermanos Rodríguez.
Guns N’ Roses, Gustavo Santaolalla, Ely Guerra, The Rasmus, Zoe, DLD, Disidente, Cultura Profética, Nortec, Porter, Babasónicos, Vicentico, Flor Amargo y los amados 31 Minutos son algunos de los que se presentarán.
“Miles serán las mentes que este 2020 exploten en partículas de luz en los escenarios del festival, construido con responsabilidad artística; el VL es un movimiento social vivo que ha buscado enaltecer el arte de la mano de la música, de ahí la importancia del diseño: este año el arte trasmite una lucha que debemos pelear juntos y que debe ser ganada”, destaca Ely Guerra.
El cartel se conforma de un Diagrama de Venn que advierte sobre la pérdida de la flora y la fauna. El Profe, encargado del diseño, explica que el círculo de arriba muestra la imagen tradicional del festival (un par de manos formando la VL), junto, unas pequeñas manos forman 2020 en lenguaje de señas; el círculo de abajo tiene un puño que nace de una flor, esto rodeado por dos especies en peligro de extinción, el jaguar y el lobo mexicano; al centro, un ojo refleja la visión que pretende llevar el Vive Latino a esta lucha.
Las figuras
GunsN’Roses
Estados Unidos
La banda es una de las atracciones más interesantes del programa.
The Rasmus
Finlandia
El cuarteto cuenta con un gran número de seguidores en México.
Ely Guerra
México
Destacó la labor que se puede hacer a través de la música con el medio ambiente.
31 Minutos
Chile
El concepto infantil es otra de las propuestas que amenizará la reunión.
(Milenio)
