El gobierno de la Cuarta Transformación pone en riesgo a la población mexicana al permitir la importación de medicamentos sin registro, como anunció recientemente la Secretaría de Salud (Ssa), ante denuncias de desabasto, alertó Juan de Villafranca, director ejecutivo de la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf).
Señaló que, entonces, con esa medida se permitirá que ingresen al país “medicamentos baratos y de mala calidad”.
Entrevistado por Pascal Beltrán del Río para Imagen Radio, De Villafranca precisó que en esta propuesta hay dos factores a considerar. En primera instancia, el riesgo en que se pone la salud de los mexicanos.
Se está hablando del listado de medicamentos y vacunas precalificadas, pero esto no significa que se garantiza su seguridad y eficacia”, puntualizó.
En segundo lugar, agregó, puede haber una competencia dispareja con medicamentos de otros países que no tienen los estándares que se les exigen a los laboratorios mexicanos, lo que permitiría la entrada a México de medicamentos baratos, pero de mala calidad.
Con la importación de medicamentos sin registro, a la larga, saldrá “más caro el remedio que la enfermedad”, aseveró el director de la Amelaf, que representa a 43 empresas farmacéuticas mexicanas con 65 plantas en todo el territorio nacional.
En ese sentido, De Villafranca indicó que “la genética es distinta en función de la alimentación y las costumbres, y esto sí influye, por eso es importante que en todos los medicamentos se realicen las pruebas y el esquema de bioequivalencia, para que brinden seguridad y eficacia”.
En este caso, explicó el director ejecutivo de la Amelaf, “no hacen daño, pero no son eficaces”.
Además, rechazó la acusación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), que afirmó que los laboratorios mexicanos no ofrecen garantías sobre la fabricación de los medicamentos que ponen en el mercado nacional.
Al respecto, el titular de la Amelaf dijo que el sector labora bajo los estándares impuestos por esa misma dependencia, por lo que puntualizó que no se les puede acusar de no cumplir con los criterios de calidad que se exigen.
Por ello, De Villafranca subrayó que los laboratorios mexicanos tienen estándares muy altos, que han demostrado durante todo este tiempo y que incluso lo han comprobado a nivel internacional, donde también se reconocen los estándares de los productos que se hacen en el país.
Eso ha sido gracias a la vara que ha puesto alta la propia Cofepris. Y nosotros sin duda estamos muy tranquilos de la calidad de los medicamentos que se hacen en México, que son, a nivel internacional, de primer orden y de primer nivel”, remarcó el director ejecutivo de la Amelaf.
(Excélsior)
