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Acudieron cientos a recibir la ceniza

El arzobispo disertó sobre la Cuaresma, a la que se refirió como un tiempo litúrgico que lleva a una renovación interior





27 de Febrero de 2020 a las 09:29 hrs -- Centinela Digital
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Un llamado a la penitencia, oración y ayuno hizo el arzobispo de Chihuahua durante la celebración de la sagrada eucaristía en la conmemoración del Miércoles de Ceniza, en la Catedral Metropolitana de Chihuahua.

“El Señor critica a los que dan espectáculos cuando rezan y cuando ayunan, es difícil tal vez hacer el bien sin mirarse a uno mismo, porque estamos impuestos a alabarnos, a poner por delante nuestro egoísmo, sin embargo, ese es el secreto, la clave por la cual el Señor puede abrir la puerta de nuestro corazón a su presencia”, afirmó monseñor Miranda durante su homilía.

Cientos de fieles acudieron a la Catedral a recibir la ceniza, con el exhorto “arrepiéntete y cree en Él”, niños pequeños, jóvenes, adultos y adultos mayores, con solemnidad y respeto, fueron cubiertos en la parte superior de la cabeza.

Don Constancio explicó que Jesús afirma que las buenas obras: el ayuno, la oración, la penitencia y la ayuda a nuestros hermanos no se busca el aprecio de los demás, sino el aprecio de Dios; educar al corazón a las cosas de Dios, para disponerlo a que Dios haga sus obras.

“Hagamos el propósito de que este Miércoles de Ceniza, con el que comenzamos el tiempo de Cuaresma, sea un propósito en obras, no sólo en deseos, pensamientos y palabras de convertirnos a Dios. Ahora es el tiempo de la salvación, ahora es el tiempo de la Gracia, no desperdiciemos estos 40 días de prepararnos a la Pascua y sean dichosos, y vayamos cerca del latir de Jesús”, invitó.

El arzobispo disertó sobre la Cuaresma, a la que se refirió como un tiempo litúrgico que lleva a una renovación interior, en el que los católicos se preparan para celebrar el misterio pascual, y la vivencia de fe: la pascua, celebrar en la vida la muerte y la resurrección de Cristo.

“Por eso la preparamos con 40 días de oración, de penitencia, de ayuno del pecado, para llegar listos, disponibles, abiertos a que muramos al pecado y nos levantemos, resucitemos a la Gracia. Es inminentemente un tiempo de la escucha –con el corazón-, de la Palabra de Dios. Hoy, Miércoles de Ceniza, junto al Viernes Santo, son dos días en los que se nos pide como preparación el ayuno y la abstinencia. Ayuno material, pero más bien ayuno del pecado; y abstinencia de todo aquello que nos aleje de Dios, con la abstinencia del alimento”, dijo.

(El Heraldo de Chihuahua)