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Dan formal prisión a un general por el caso Ayotzinapa

El alto mando castrense y otros dos oficiales del Ejército fueron sometidos a proceso por los delitos de desaparición forzada y delincuencia organizada, informan fuentes militares





22 de Septiembre de 2022 a las 11:05 hrs -- Jorge Perusquia
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Un juez federal dictó ayer auto de formal prisión contra el general José Rodríguez Pérez y dos militares más, quienes se encuentran presos en la cárcel del Campo Militar 1-A, por el caso de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.

Lo anterior se relaciona con los delitos de desaparición forzada y delincuencia organizada, informaron fuentes castrenses.

Los otros dos militares también procesados son el capitán José Martínez Crespo y el sargento Eduardo Mota Esquivel, quienes están acusados de desaparición forzada y delincuencia organizada, por sus presuntos nexos con el grupo criminal Guerreros Unidos.

Ambos elementos castrenses fueron subordinados de Rodríguez Pérez cuando éste fue comandante del 27 Batallón de Infantería del Ejército en Iguala, Guerrero. Quedó pendiente el auto de formal prisión por delincuencia organizada y desaparición forzada contra el subteniente Fabián Alejandro Pirita Ochoa, señalaron las fuentes.

De acuerdo con autoridades federales, la semana pasada los tres militares se entregaron a la Fiscalía General de la República (FGR) para responder a las acusaciones por su presunta responsabilidad en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, caso que la próxima semana cumple ocho años.

En agosto pasado, la Fiscalía General de la República notificó al área legal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) que un juez federal giró 20 órdenes de aprehensión contra mandos y tropa de los batallones 27 y 41 de Infantería, presuntamente relacionados con la desaparición de los estudiantes normalistas, para que procediera a su localización e identificación.

Al defender la nueva investigación del caso Ayotzinapa, el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas Rodríguez, acusó al general José Rodríguez Pérez de ordenar el asesinato y desaparición de seis de los 43 normalistas que se presume que se habrían mantenido con vida cuatro días después de los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.

El también titular de la Comisión Presidencial para la Verdad y Acceso a la Justicia en el Caso Ayotzinapa implicó al entonces coronel José Rodríguez Pérez de ordenar la muerte y desaparición del grupo de jóvenes.

Rodríguez Pérez, ascendido a general brigadier en 2015, tenía a su mando el 27 Batallón de Infantería en septiembre de 2014, con sede en Iguala, al que ordenó investigar lo que estaba sucediendo con los normalistas.

“Se presume que seis de los estudiantes se mantuvieron con vida hasta cuatro días después de los hechos y que fueron ultimados y desaparecidos por órdenes del coronel, presuntamente el entonces coronel José Rodríguez Pérez”, refirió.

Con base en información “corroborada con llamadas al teléfono de emergencia 089”, Encinas Rodríguez detalló que los seis estudiantes estuvieron privados de la libertad en un sitio llamado “la bodega vieja”, sin precisar el lugar exacto, y de ahí habrían sido entregados al coronel.

“Y mandaron cocinar a 10 de los estudiantes e incluso hay la información, corroborada también con llamadas al teléfono de emergencia 089, donde se acredita que presuntamente seis de los estudiantes de los 43 desaparecidos estuvieron retenidos durante varios días y con vida en lo que llaman ‘la bodega vieja’ y de ahí fueron entregados al coronel, como ven en los testimonios, quien se hizo cargo de estos muchachos”, añadió.

Lo anterior, aseguró el funcionario federal, demuestra que los normalistas nunca estuvieron juntos, como plantea la “verdad histórica”, que establece que los 43 estudiantes fueron detenidos, ejecutados y quemados en el basurero de Cocula y sus restos esparcidos en el río San Juan, “porque en muchos de los casos era tal la magnitud de la movilización de sicarios y el número de muchachos que pretendían desaparecer que se reubicaron en distintos puntos” aledaños a Iguala.

(El Universal)