En todo el mundo se observan grandes esfuerzos e iniciativas en favor de la salud de los seres humanos apoyados con el desarrollo de aplicaciones móviles, ya sea para mejorar la calidad de vida de las personas promoviendo cambios en el comportamiento, en sus hábitos alimenticios o en el aumento de la actividad física.

Sin embargo, de acuerdo con Florence Gaudry-Perkins, directora de asuntos públicos de Alcatel-Lucent, este es un trabajo aislado por un participante, que muchas veces es del sector privado, y para generar un mayor impacto es necesaria la participación de este segmento, del gobierno y la sociedad civil en el desarrollo de la salud móvil también llamada mHealth.

“La salud móvil utiliza los celulares, smartphones, dispositivos de monitoreo de pacientes, sensores conectados, asistentes digitales personales y otros equipos inalámbricos para apoyar las prácticas médicas y de salud pública.

Esta incluye una amplia gama de aplicaciones y servicios, centrándose en muchos aspectos de la salud, incluyendo prevención, tratamiento y seguimiento”, explicó.

En su opinión la mHealth es una herramienta muy poderosa que puede llegar a la mayoría de la población, y es aún más importante para las personas que no pueden acceder fácilmente a los servicios de salud en zonas marginadas o remotas.













(Vanguardia)