La presidenta suspendida de Brasil, Dilma Rousseff, confirmó que no asistirá a la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, información que fue proporcionada por uno de sus asesores cercanos.

De acuerdo con el testimonio, la mandataria Dilma Rousseff si había sido invitada por las autoridades a asistir a la apertura de la justa olímpica, sin embargo, decidió no formar parte del evento. En contraparte, el presidente interino de la nación, Michel Temer, será quien declarará los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro como inaugurados.

En entrevista con el diario Reuters, uno de los asesores confirmó el desinterés de la mandataria suspendida, Dilma Rousseff, por ocupar un rol secundario en la ceremonia deportiva, tal como ella misma lo declarara durante una conversación con Radio France Internationale.

Cabe mencionar que el ex mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, tampoco asistirá a la inauguración de los Juegos Olímpicos, tras considerar que es un evento que encabezarán aquellos que realizaron un golpe de Estado contra la nación.

De acuerdo a un sondeo entre senadores, la presidenta suspendida, Dilma Rousseff, será señalada como culpable por haber violado, presuntamente, las normas presupuestarias. De presentarse dicho escenario, la funcionaria quedaría inhabilitada permanentemente de la Presidencia y Temer asumiría formalmente lo que queda de la gestión.












(Sexenio)