En la conferencia “Materiales sostenibles para la arquitectura”, presentada por el doctor Ernesto Ocampo Ruíz.
Este inventor forma parte de los especialistas que han sido invitados por el Municipio, a través del Instituto Municipal de Investigación y Planeación “IMIP”, dentro de este ciclo de conferencias, señaló el Director General de la descentralizada, Roberto Mora Palacios, tendientes a buscar alternativas para una mejor ciudad.
Ocampo Ruíz es investigador especialista en materiales avanzados de la Facultad de Estructura y Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México y maestro de posgrado de la Universidad de La Salle en León, Guanajuato, donde trabajó y creó el proyecto de “Energy-Concrete”, con el que se busca cosechar energía calorífica del sol en los materiales de concreto para transformarlos en electricidad.
A diferencia de la energía fotovoltaica, que toma la energía de los rayos solares, este invento utiliza el espectro infrarrojo, ultravioleta, la temperatura e la atmósfera y la almacena en masas térmicas del material
Señaló que el proceso de investigación todavía continúa para iniciar en breve con lo que puede ser la comercialización de estas placas prefabricadas que podrán utilizarse en diferentes tipos de obra.
Indicó que por medio de semiconductores se hace la transferencia de calor y se almacena en unos capacitores que lo convierten en electricidad.
Explica que los dispositivos de catalizadores se colocan en la parte inferior de las placas de concreto para llevar a cabo este proceso.
“El concreto, por su naturaleza porosa, tiene la capacidad de almacenar energía en grandes cantidades, y si se tiene en cuenta que los materiales más usados a nivel mundial para las construcciones son el acero y el concreto, hablamos de una tremenda oportunidad para aprovechar el recurso”, destacó.
Como ejemplo de lo que se puede hacer con esto, indica que con tres metros cuadrados se puede proporcionar energía a una luminaria urbana durante 24 horas.
Comenta también que una de las ventajas que trae este sistema es que la energía se genera en el mismo lugar de recepción, por lo que no se requiere transportar la electricidad, generando pérdidas en el transporte y distribución.
Con este invento, por ejemplo, se puede electrificar alumbrado público, en plazas que captan la energía del sol con el mismo pavimento.
“Con la oportunidad de que las ciudades se conviertan en su propia mina de energía, con techos y pavimentos urbanos que se vuelvan sus los mismos colectores de la arquitectura”, apuntó.
