El Gabinete de Seguridad de Israel aprobó el plan del primer ministro Benjamín Netanyahu para ocupar la Ciudad de Gaza como parte de su estrategia para derrotar a Hamás. El operativo contempla tomar control militar de la urbe y garantizar ayuda humanitaria fuera de las zonas de combate.

El plan incluye cinco principios: desarmar a Hamás, recuperar a los rehenes, desmilitarizar la Franja, mantener control de seguridad israelí y establecer una administración civil alternativa sin Hamás ni la Autoridad Palestina.

La ONU advirtió que esta ofensiva podría tener consecuencias catastróficas para la población gazatí. Israel estima que 50 rehenes siguen en manos de milicias palestinas, de los cuales solo una veintena estarían con vida.



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