Tras diez días de conversaciones en Ginebra, no hubo acuerdo para aprobar el primer tratado internacional contra la contaminación de plásticos.
Los países coincidieron en seguir negociando, pero persiste la división: la mayoría exige compromisos obligatorios para reducir producción y uso, mientras un bloque liderado por Arabia Saudita, junto a Irán, Rusia y Estados Unidos, pide que sean voluntarios.
El borrador presentado por el embajador ecuatoriano Luis Vayas no logró consenso, aunque servirá de base para futuras rondas.
Greenpeace advirtió que el estancamiento refleja la presión de la industria petroquímica y pidió un acuerdo firme y vinculante.
-EFE-