El Senado de Texas aprobó una nueva ley que restringe el acceso a píldoras abortivas en este estado donde el aborto ya está prohibido.
La norma, que debe ser promulgada por el gobernador Greg Abbott, permitirá que cualquier ciudadano demande a quien facilite la prescripción, fabricación o envío de estas pastillas y reclame una indemnización mínima de 100 mil dólares.
Aunque no sanciona directamente a las mujeres que intenten obtenerlas, la medida convierte a los texanos en lo que críticos llaman “cazarrecompensas”.
Con esta legislación, Texas se suma a más de 20 estados que han endurecido las restricciones tras la anulación de Roe vs. Wade por la Corte Suprema en 2022.
-AFP-