Hay relatos que sobreviven al tiempo porque hablan de lo que nunca cambia: el poder, la ambición y la lucha por definir el propio destino. War of the Kingdoms retoma la mitología de los nibelungos y la transforma en una historia contemporánea donde esos mismos impulsos cobran nueva vida. En ese marco (un mundo de guerras, traiciones y criaturas ancestrales) la mirada de Kriemhild se convierte en el eje que redefine lo que significa ser una heroína, no la figura que cumple una profecía, sino la mujer que decide romperla.
(milenio)