Al menos 36 personas murieron y otras nueve permanecen desaparecidas por el paso de un devastador ciclón en el sur de Brasil, según el último balance divulgado hoy por las autoridades, que se preparan para nuevas lluvias en las próximas horas.
Las precipitaciones y los fuertes vientos causaron destrozos y dejaron poblaciones sumergidas, mientras decenas de rescatistas intentaban llegar a las zonas incomunicadas donde aún quedaban miles de personas aisladas.
Las autoridades elevaron de 31 a 36 el balance de muertos y reportaron nueve desaparecidos.
Los embates del ciclón se sintieron en 79 municipios y más de cino mil 800 personas debieron abandonar sus hogares. En total hay más de 56 mil afectados.
(EL SOL DE MÉXICO)