La Guardia Costera de Estados Unidos concluyó que la tragedia del sumergible Titán, ocurrida en 2023 durante una expedición al Titanic, pudo haberse evitado. El informe final señala fallas graves en el diseño, mantenimiento y falta de certificación del vehículo operado por OceanGate.
El Titán implosionó en el Atlántico, causando la muerte de las cinco personas a bordo, incluido el CEO de la empresa, Stockton Rush. La investigación reveló que OceanGate ignoró alertas previas y omitió inspecciones clave tras una expedición en 2022.
Como resultado, se recomendó reforzar regulaciones para sumergibles turísticos y científicos, y establecer controles internacionales más estrictos para evitar futuras tragedias.
-EFE-