La presidenta Claudia Sheinbaum defendió la entrega del bastón de mando a los nuevos ministros de la Suprema Corte, que se realizará el próximo 1 de septiembre. Afirmó que las críticas a esta ceremonia, de origen indígena, reflejan “profundo racismo y clasismo” por parte de sus adversarios.
Destacó que el bastón representa un legado y una gran responsabilidad, y celebró que Hugo Aguilar Ortiz, próximo presidente del máximo tribunal, provenga de un pueblo originario.
El proceso de instalación de la nueva Corte incluirá tres ceremonias: una en el Senado, otra en la sede de la SCJN y la última con comunidades indígenas. Aguilar Ortiz invitó al pueblo a seguir estos actos como parte de un momento histórico para el país.
-LÓPEZ DÓRIGA DIGITAL-