El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó que 78 migrantes fueron detenidos en un operativo de tres días en el Valle del Río Grande, en Texas. La operación, llamada Pick-Off, fue coordinada por ICE, el FBI y la DEA en cuatro condados fronterizos.
De los arrestados, 65 eran personas previamente deportadas y en libertad condicional tras cumplir condenas por delitos estatales como narcotráfico y agresión. Ahora enfrentan cargos federales por reingreso ilegal al país.
Otros 11 fueron acusados de violaciones migratorias y serán deportados de inmediato, mientras que dos más enfrentan cargos menores por evitar ser examinados por oficiales de inmigración.
El fiscal Nicholas Ganjei advirtió que quienes ingresen ilegalmente y cometan delitos en Texas deben esperar acciones rápidas de las autoridades.
-EFE-