Honduras vive una elección presidencial al límite, con empate técnico entre los conservadores Nasry “Tito” Asfura, del Partido Nacional, y Salvador Nasralla, del Partido Liberal. Con más de la mitad de las actas escrutadas, ambos candidatos rondan el 40 % de los votos, separados por apenas unos cientos de sufragios.
Los resultados muestran el regreso de la derecha al poder, mientras la oficialista Rixi Moncada quedó muy rezagada. La contienda estuvo marcada por el inesperado apoyo del presidente estadounidense Donald Trump a Asfura y por el debate sobre restablecer relaciones con Taiwán, postura que comparten ambos aspirantes.
El país sigue a la espera de resultados definitivos del Consejo Electoral.
-EFE-