Rusia pidió al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no cometer un “error fatal” en su política hacia Venezuela y alertó que una escalada podría tener consecuencias impredecibles para todo el hemisferio occidental.
Moscú reiteró su respaldo al gobierno de Nicolás Maduro y defendió el derecho de los países a elegir a sus propios gobernantes.
En paralelo, China rechazó el bloqueo estadounidense a los petroleros venezolanos, al calificarlo como intimidación unilateral. Pekín, principal comprador de crudo de Venezuela, sostuvo que apoya la soberanía del país sudamericano.
Las reacciones surgen tras el anuncio de Washington de bloquear buques sancionados, elevando la tensión regional.
-EFE-