El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dejó abierta la posibilidad de una acción militar contra Irán, al declarar este miércoles que “nadie sabe” cuál será su decisión final. Trump aseguró que Teherán enfrenta graves problemas y quiere negociar, pero lamentó que no lo hicieran antes.

El mandatario abandonó abruptamente la cumbre del G7 para reunirse con su Consejo de Seguridad Nacional, tras los ataques de Israel contra instalaciones nucleares iraníes. También mencionó que dio a Irán un plazo de 60 días para negociar y que al día siguiente Israel comenzó los bombardeos.

Trump reafirmó su mensaje de “rendición incondicional” y calificó al régimen iraní como “matones de patio de colegio”. La tensión continúa en aumento mientras el mundo observa si EE.UU. decide intervenir directamente.



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