En Pakistán, las lluvias torrenciales de las últimas 24 horas han causado al menos 164 muertos, la mayoría en la provincia montañosa de Khyber-Pakhtunkhwa, fronteriza con Afganistán.
También se reportaron víctimas en la Cachemira administrada por Pakistán y en la región turística de Gilgit-Baltistán.
Con este nuevo balance, el número de fallecidos desde el inicio de la temporada de monzones, a finales de junio, se acerca a los 500, incluyendo numerosos niños.
Las autoridades de gestión de desastres advierten que las precipitaciones continuarán, aumentando el riesgo de inundaciones y deslaves en las zonas afectadas.
-REUTERS-