El gobierno de Donald Trump suspendió la emisión de visas de trabajo para camioneros extranjeros, lo que ha generado temor entre los inmigrantes que ya laboran en Estados Unidos.

El secretario de Estado, Marco Rubio, justificó la medida señalando que el aumento de conductores foráneos “pone en peligro la vida de los estadounidenses y el sustento de los camioneros locales”.

Organizaciones y choferes advierten que la decisión podría derivar en la revocación de licencias comerciales y deportaciones. Desde junio, además, se exige a los conductores de carga aprobar una prueba de inglés, en cumplimiento de una orden ejecutiva de Trump.

La polémica se intensificó tras un accidente en Florida protagonizado por un camionero inmigrante que dejó tres muertos, hecho que, según abogados, ha puesto “bajo la lupa” a todos los transportistas extranjeros.

Con información de EFE.