En conferencia de prensa, el investigador Jorge Cueto, autor del medicamento, enfatizó que está comprobado que no existe ningún otro fármaco con estas funciones, y la facilidad del tratamiento representa un ahorro en tiempo y recursos para curar estas lesiones.
Algunas características del Pebisut son su aplicación tópica, sin necesidad de instrumentos especiales, más que la higiene en un aplicador; tiene vigencia de hasta un año, sin refrigeración; quita el dolor, ardor y permite mejorar la calidad de vida.
“La presentación de este medicamento es un ungüento, que no necesita más que de un aplicador para usarse; no es tóxico, al ser un polímero vegetal natural biodegradable, y además no hay reacción de rechazo en el cuerpo”, detalló.
BENEFICIOS. Las reacciones directas del medicamento es la desaparición (en un lapso de hasta tres días) del dolor, ardor y secreción que provocan las úlceras varicosas, siempre que el paciente tome otros cuidados como mantener los pies en alto en su casa, señaló el especialista.
El creador de Pebisut subrayó los beneficios de tiempo y económicos que el paciente obtiene, pues se somete a un tratamiento que puede lograr la cicatrización total hasta en un mes y ahorra en recursos.
“Los costos de una persona con úlceras varicosas —comenta— puede llegar a triplicarse, pues cuando éstas avanzan genera incapacidad en las apersonas, por lo que tienen que faltar a sus trabajos, por ejemplo, y genera más gastos”.
Un tratamiento puede constar de entre dos o tres frascos del ungüento, siempre y cuando las personas tengan los cuidados requeridos; asimismo, Cueto enfatizó que cuando las úlceras están avanzadas y la gangrena llegó hasta el punto de la amputación, entonces el Pebisut ya no sirve.
El investigador aclaró también que no se trata de un antibiótico, sino un medicamento que ayuda a la cicatrización total de heridas presentes en personas con pie diabético, por lo que no produce resistencia y tiene propiedades contra las bacterias.
“La existencia de un medicamento como este, cuyo uso es sencillo para cualquier persona, representa gran ayuda para los pacientes que habitan poblaciones periféricas de la ciudad, pues no tienen que moverse a la ciudad y menos de su comunidad”.
DESARROLLO. Tras nueve años de fases experimentales, en el Centro de Investigación de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Anáhuac, con ratones por principio, y después en pruebas con más de cien pacientes, se comprobó su efectividad
“En 2005 comenzamos en el laboratorio con la primera fase experimental, donde probamos los efectos con ratones. En todo este tiempo me dediqué a estar buscando los componentes necesarios para establecer este medicamento, hasta que quedó este componente”, agregó.
La patente de este medicamento ya fue lograda por el investigador en Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y México.
CONTINUIDAD. El 5 de septiembre de este año, el medicamento creado por Jorge Cueto recibió la certificación por parte de la Cofepris, y la producción inició el 15 de noviembre del Pebisut y se espera llegar a 20 mil frascos, con un contenido de 30 gramos cada uno.
Y aunque en estos momentos el investigador y su equipo de colaboradores buscan socios que puedan comercializar el producto, las aplicaciones se hacen en personas de escasos recursos, principalmente, a través de su consultorio y en el Hospital Juárez.
(Crónica)